La octava maravilla del mundo. El castillo del Coral.
Nacido en 1887 y tras un amargo fracaso amoroso, Edward Leedskalnin partió desde su Letonia natal hacia los Estados Unidos, a la edad de 26 años. Instalado ya en Florida City, y con la soledad de sus 45 Kg. de peso neto, Edward fue capaz de realizar una de las hazañas más impresionantes (y enigmáticas) de las que se tengan evidencias concretas: El “Coral Castle” o “Rock Gate Park”.
Erigido en bloques descomunales de Coral puro, el gran edificio levantado en honor a la que hubiera sido la prometida de Edward, consta de piedras de hasta 30 toneladas de peso. Tras veintiocho años de trabajo solitario, y con la única ayuda de herramientas confeccionadas por el propio Edward, el Coral Castle se erigió imponente sobre una de las costas de la Florida City, para ser trasladado diez años más tarde a Homestead, una localidad de la misma isla.
Los enigmas que tornan el Castillo de Coral y su construcción no son pocos. En primer lugar, el levantamiento de una estructura edilicia de 1.100 toneladas de peso para una sola persona. Menudo hombre es una hazaña sino milagrosa, increíble. El mismo Edward Leedskalnin afirma que los métodos de construcción usados sobrepasan lo común, ya que un estudio sobre los campos magnéticos terrestres y energía le permitieron vencer las normas establecidas de gravedad y equilibrio, llegando a usar las mismas técnicas empleadas en la construcción de las pirámides de Egipto. De igual forma, es aún más difícil explicar como logró trasladar el monumento de un sitio a otro, sin ayuda de nadie.
El interior del Castillo de Coral es en si mismo una exquisita de alto valor artístico. Es considerado oficialmente un “Lugar histórico” por lo que se ha transformado en un museo abierto a todo aquel curioso que pretenda develar como trabajaba y vivía el excéntrico Sr. Leedskalnin. Juegos de mesas y sillas de jardín de coral, escaleras y relojes de sol con precisión de minutos son algunas de las maravillas presentadas al visitante del castillo.
A parte del gran enigma concreto que depositó sobre las costas de Florida, Edward Leedskalnin expuso en diferentes tratados, teorías poco convencionales acerca del magnetismo terrestre y su relación con la energía corporal. Se dice que nunca se lo veía trabajando, salvo escasas noches en las que la luz de su recámara ubicada en la torre permanecía encendida. Los misteriosos estudios sobre descubrimientos de leyes que rondaban entre lo científico y lo sobrenatural nunca fueron tomados seriamente por los científicos conservadores. No obstante, nadie puede negar que en un lugar de Florida, más de 1000 toneladas de roca y coral se yerguen en honor a un amor que jamás se pudo consolidar.
¿Cómo pudo construir un solo hombre, por las noches, el castillo del coral? Sin herramientas.
¿Cómo pudo mover toneladas de grandes rocas?
¿Porqué nadie podía ver como trabajaba?
¿Como podía saber cuando cautelosamente venía alguien?
En mi opinión Edward fué un genio, sin lugar a dudas. Pero hay lago que no nos cuadra. Poseía algun tipo de poder o conocimiento, que los humanos o que nosotros desconocemos.