Anunnakis : Leyes Espirituales
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martes, 16 de diciembre de 2014

La llave maestra de la GRATITUD


Como ya sabemos, todas las situaciones de la vida, ya sean satisfactorias o dolorosas, nos enseñan algo y además son las guías que nos brinda el universo para nuestro bien, y nos ayudan a identificar las creencias limitantes basadas en el miedo para que las podamos superar.

Son también las que nos permiten descubrir la presencia de Dios en todo lo que existe, cuando este maravilloso suceso se da abrimos la puerta a la provisión generosa y eterna del universo.

Las 7 reglas del Universo, la tabla esmeralda


Hermes Trismegisto, maestro de maestros, anteriormente encarnado como el dios egipcio Thot y posteriormente como el dios Mercurio del pabellón romano y de la Alquimia, nos dejó la Tabla Esmeralda, un tratado de sabiduría en el que están escritos los Siete Principios o Leyes de Equilibrio que rigen el Universo. En esta entrada veremos sucintamente en qué consiste cada una de esas leyes y cuáles son sus funciones principales.

jueves, 3 de julio de 2014

Potencialidad Pura


La Ley de la Potencialidad Pura se basa en el hecho de que el hombre, en su estado esencial, es conciencia pura. La conciencia pura es potencialidad pura; es el campo de todas las posibilidades y de la creati­vidad infinita. La conciencia pura es la esen­cia espiritual. Siendo infinita e ilimitada, también es felicidad pura.

Cuando se descubre la naturaleza esen­cial y se sabe quién se es realmente, ese solo conocimiento encierra la capacidad de convertir en realidad todos los sueños, porque el hombre es la posibilidad eterna, el potencial inconmensura­ble de todo lo que fue, es y será.

martes, 29 de noviembre de 2011

La Ley del Karma o Ley del Equilibrio, Causa y Efecto

Karma y Reencarnación

La evolución supone aprender por medio de las elecciones, y para este fin nuestro Creador nos ha otorgado el libre albedrío. Aquí en la Tierra, el libre albedrío es utilizado, y sus consecuencias aprendidas, en la forma más extrema y bajo las condiciones más difíciles.
En niveles más altos del ser es posible ver en un solo momento los resultados probables de varios caminos alternativos.
Se trata simplemente de tomar la decisión correcta. Pero esta fase evolutiva terrestre está nublada por el “Velo del Olvido”, por ello no nos es posible mirar hacia el futuro.
Nosotros, aquí en la Tierra, debemos aprender mediante el arduo proceso de la experiencia física; debemos tomar decisiones, sopesar las ventajas percibidas tanto para nosotros como para los demás, y luego experimentar las consecuencias de nuestras decisiones.
Como punto central del concepto de libre albedrío se encuentra la Ley del Karma, o la Ley de Causa y Efecto.
La Ley del Karma es también conocida como la Ley del Equilibrio.

Durante el proceso de vivir, evolucionar, experimentar y aprender, nuestras acciones afectan a los demás, ya sea en forma dañina o benéfica, y por tanto se incurre en numerosas y a veces complejas deudas en nuestra propia Hoja de Balance evolutiva.
La Ley del Karma requiere que los efectos de nuestras acciones sobre los otros, incluyendo todas las formas de vida, los reinos animal, vegetal y mineral, deban estar siempre equilibrados. Cuando dañamos a los demás, incurrimos en una deuda con nosotros mismos al igual que con estos. Cuando otros nos dañan, ellos incurren en una deuda con ellos mismos al igual que con nosotros.

Deudas por el bien o el mal, hechas por nosotros o por otros, deben quedar equilibradas por ambas partes. De igual manera, cuando te haces daño, quizá por el uso indebido de tu cuerpo físico, creas un desequilibrio, una deuda contigo mismo que debe ser reparada por tu comprensión y rechazo a tales acciones. Todo, al final, debe estar en equilibrio.
Por medio de esta Ley de Equilibrio, o de Causa y Efecto, experimentamos y aprendemos de los resultados de nuestras acciones elegidas y de las de otros.
De acciones equivocadas tomadas en circunstancias específicas, le siguen efectos equivocados; debemos entonces revisar y recrear esas circunstancias una y otra vez hasta que, habiendo aprendido de todos los efectos desagradables por haber tomado el sendero equivocado, escojamos el sendero correcto.

Esta es la Ley del Karma. Se presentarán pruebas instigadas por nuestro Yo Superior Espiritual y serán repetidas hasta que sean “aprobadas” por nuestro propio reconocimiento, aceptación y asimilación de la lección que debe ser aprendida.
Los retos serán planeados por nosotros y repetidos hasta que sean conquistados. Este proceso puede ocurrir como una lección corta que dure un momento o un día; o puede tomar toda una vida, o varias vidas, incluso varias encarnaciones. Pero nosotros, y solamente nosotros, requerimos que nuestras lecciones sean, en última instancia, aprendidas completamente.
De igual manera, nuestras ‘buenas’ acciones, acciones que muestran respeto por otras formas de vida, esos ‘actos de bondad al azar’ que benefician a otros, ponen en acción una reacción en cadena positiva.

La Ley del Karma trabaja ‘automáticamente’. De forma magnética atraemos hacia nosotros las ‘malas’ experiencias cuando tenemos necesidad de aprender de ellas. De igual forma, cuando no necesitamos aprender una lección en particular, no seremos tocados por ningún peligro ni ningún mal. Resonamos magnéticamente hacia las experiencias buenas y malas, acercándolas a nosotros cuando tenemos necesitad de aprender de ellas.
“¡No veáis el karma solamente como una columna del Debe o Haber en el Libro Divino de Contabilidad en el que se ha registrado lo que debéis a otro por el mal que le habéis hecho! No funciona de esa manera. Se trata más bien de un proceso de enseñanza en el que aprendéis a través de lo que habéis hecho. Sois vosotros los que habéis creado esas ondas en la charca de la vida y ellas os afectarán a su vez.
El propósito del karma no es el de castigo. Más bien es un proceso de equilibrio y educación.”
[The Master ZEN TAO, canalizado por el Centro Ramala, Glastonbury]
También debemos entender que lo que damos en forma de energía, creatividad o esfuerzo (poder) al Universo, eventualmente regresará a nosotros. Igualmente, aquello que tomamos del Universo en forma de energía y creatividad de los demás, es una deuda, que al final deberá quedar en equilibrio por nuestras subsecuentes ofrendas.
“El Universo funciona según un plan, y ese plan ha dividido el poder, o la creatividad, de manera proporcionada.
Si vosotros demandáis del Universo más de lo que os toca, os presentará el plato con vuestra porción y hasta ahí, porque ya no hay más para vosotros. Si tratáis de tomar de otras personas, podría funcionar por un tiempo porque algunas personas no saben cómo sostener su poder y lo regalan. Pero el Universo es un gran ecualizador, y si vosotros regaláis vuestro poder, el Universo lo va a redistribuir, no necesariamente entre las personas a nivel físico, puede utilizarlo para crear nuevos universos, o darle otro tipo de uso.”
[The Master VYWAMUS, un aspecto más elevado de Sanat Kumara. Canalizado por Janet McClure en "El Preludio a la Ascensión", publicado en l996 por Light Technology Publishing, P.O. Box 1526, Sedona, Az 86339]
En los niveles superiores, el proceso de evolución tiene lugar como una continuidad ininterrumpida del estado consciente y despierto. Sin embargo, a nivel de la Tierra, las dificultades de la vida terrenal y el envejecimiento físico de los cuerpos densos pone limites a la duración del tiempo sobre este planeta en el que podemos tolerar la vida.
Esto, a su vez, demanda que “muramos”, que revisemos nuestra vida desde un nivel superior y, luego, después del tremendamente necesitado período de descanso espiritual, regresemos para vivir otro ciclo de nacimiento y vida sobre la Tierra. Este ciclo de nacimiento y re-nacimiento es conocido como reencarnación.

La reencarnación es un ciclo de nacimiento, muerte y renacimiento en el cual pasamos de los reinos espirituales a través del “Velo” a una encarnación dentro del denso nivel físico de la Tierra, desprovistos del contacto directo con los Reinos Superiores. Hacemos esto con el objeto de aprender ‘en aislamiento’ el tipo de lecciones que solamente pueden ser aprendidas en tales mundos.
Cada lección debe ser completamente aprendida, y la Ley del Karma requiere que repitamos este proceso de reencarnación hasta que hayamos dominado las lecciones particulares involucradas en este nivel.

“La Tierra es una escuela, y vosotros aprendéis hasta de los errores.
Si os enfrentáis a un examen y suspendéiss, os esforzáis en hacerlo de nuevo. Así que si tenéis lecciones que aprender en una vida y fracasáis en aprender, entonces en otra vida os presentaréis ante esas mismas lecciones; porque no podéis progresar – y toda vida es una progresión hacia arriba, una espiral en ascenso – hasta que hayáis aprendido esas lecciones.
“Tenéis una prueba que pasar, una que os habéis prometido cumplir. El pasarla depende de vuestro esfuerzo. Si no pasáis la prueba en una experiencia tendréis otras oportunidades para hacerlo. Siempre encontraréis nuevas oportunidades que se abren ante vuestros ojos.
Con el tiempo realizaréis lo que os habéis prometido, sin embargo, habrá muchas distracciones que os podrán alejar de vuestra objetivo. El poder del Espíritu puede triunfar y triunfará al final. Es como un poderoso imán que os acerca a Él.

Es el esfuerzo el que cuenta; la responsabilidad es vuestra, nadie puede realizar la misión por vosotros. La báscula de la Justicia Divina está perfectamente equilibrada, no debe existir ninguna deuda si vais a progresar.”

The Spirit Guide TENDOR, en "Full Cycle" por Ripley Webb – Marcus Books, Queensville, Ontario, Canada]
Cada nueva encarnación es planeada con anticipación con la ayuda de nuestros Guías y Maestros Espirituales.
Se hace una revisión de fallos y debilidades pasadas en consulta íntima con ellos, y se hacen planes para la aparición de oportunidades óptimas para la próxima vida con el fin de experimentar y vencer esas debilidades.
Estos acontecimientos pueden ocurrir durante esa vida de manera bastante arbitraria e inesperada, y algunas pueden incluso ser traumáticas, provocando que la personalidad abiertamente culpe al azar su ‘mala suerte’.

Sin embargo, todos esos acontecimientos han sido planificados previamente por la misma alma en niveles superiores para ser manifestados en algún momento durante la vida terrenal de esa alma. No son, como podría parecernos en el momento en que ocurren los hechos, el resultado del capricho arbitrario de un Azar despreocupado o de nuestro Creador.
Cuando el alma encarna sobre la Tierra también hace un ‘contrato’ con ella misma y con sus Guías Espirituales y con la Jerarquía Espiritual para comprometerse con una vida sobre la Tierra que tenga cierta duración, con el objeto de aprender lecciones específicas.
Si el alma encarnada subsecuentemente encuentra que las lecciones son muy difíciles y decide terminar con su vida prematuramente, tal es el caso de un suicidio, las lecciones no serán evitadas, solamente postpuestas. El alma necesitará entrar en el largo proceso de muerte y renacimiento y así vivir aquellos años remanentes y aprender aquellas lecciones que fueron evitadas previamente.
Este es el porqué la mayoría de nosotros, a nivel de conciencia de la Tierra, tenemos el instinto bien arraigado de que el suicidio es algo totalmente erróneo. De hecho no es solo una traición hacia nuestro plan Superior de evolución, también es un mal uso de las facilidades y oportunidades que nos fueron dadas por nuestro Creador y su Jerarquía Angélica y Espiritual.

A su vez, una comprensión más amplia de los múltiples conceptos del ‘libre albedrío’, karma y reencarnación hará más fácil para nosotros vislumbrar el ‘drama de la vida’ y la naturaleza fundamental del sufrimiento:
“El drama de la vida tiene un propósito: enseñarle a nuestra conciencia a evolucionar.

Todo lo que sucede en el plano de la Tierra no sucede por casualidad, sino porque lo hemos atraído hacia nosotros a través de nuestro comportamiento en esta o en vidas pasadas, y hemos aceptado conscientemente el reto que esto representa.
Queda ampliamente comprendido que el concepto de ‘libre albedrío’ nos permite escoger cómo vamos a reaccionar ante determinadas circunstancias; sin embargo, es importante darnos cuenta que también ejercitamos el ‘libre albedrío’ en nuestra selección de retos que hemos aceptado tomar en cada encarnación. A través del ‘libre albedrío’ escogemos nuestros retos y nuestras lecciones; a través del ‘libre albedrío’ escogemos cómo vamos a reaccionar frente a ellos.
“Es difícil para aquellos que no aceptan el concepto de reencarnación, de vida-tras- vida-tras-vida, ver el sufrimiento como un proceso evolutivo. Pero cuando la reencarnación es aceptada como parte integral de nuestro punto de vista sobre la evolución, es fácil comprender que hacemos patente, con cada nuevo cuerpo físico, todo lo que hemos creado en otras vidas terrenales, y en otros niveles de existencia más allá del plano físico de la Tierra.
Traemos con nosotros no sólo nuestra sabiduría espiritual, también los pecados del pasado, las lecciones que no hemos aprendido, el karma que nos debemos a nosotros y a los demás. A medida que avanzamos en la vida que ahora vivimos, automáticamente atraeremos hacia nosotros las lecciones que hemos escogido aprender, el karma que hemos escogido transmutar.
“Por tanto, no existe la tragedia por azar. Todo lo que sucede en el plano de la Tierra tiene una razón, un propósito.
Vivimos en un mundo en el cúal muchas personas aparentemente experimentan grandes tragedias. La tragedia le llega a las personas ya sea porque la escogieron para su propio destino o porque les brindará una lección en la vida que todavía no han aprendido.
La tragedia es trabajar la causa y el efecto; a medida que experimentamos sus efectos, aprendemos a cambiar la causa.
La experiencia de una tragedia también enseña la simpatía y la compasión, la habilidad para aceptar y perdonar las pequeñas imperfecciones de los demás, para que ellos, a su vez, hagan lo mismo con nosotros.

“Si hay un punto en el que quiero hacer énfasis ahora es éste: ese sufrimiento ha sido escogido por ti. No te lo da tu Creador como un castigo. Tú lo escoges, voluntariamente, como una lección para aprender, como una lección que tu alma necesita en este preciso momento de su evolución.”

miércoles, 13 de abril de 2011

Las 7 leyes universales

LOS SIETE PRINCIPIOS UNIVERSALES


“Los principios de la verdad son siete; aquel que conoce éstos, con comprensión, posee la llave mágica ante cuyo toque todas las puertas del templo se abrirán de par en par”.


La vida, el universo, tiene un orden, unas leyes que se conozcan o no, siempre van a estar presente, siempre van a estar en perfecto funcionamiento.

Estas leyes son “Los 7 principios universales.


Cuando se actúa a favor de ellas nos va la vida bien, y decimos que somos felices, cuando actuamos en contra de ellas tenemos el sentimiento de infelicidad, y angustia, que no nos permite avanzar, y es cuando sentimos que nuestra vida está estancada.


Para ir a favor de estas leyes hay que conocerlas, y este conocimiento es el que nos hará libre, ya no nos sentiremos más víctimas de nuestro destino, seremos los/las creadores/as de nuestra vida, tomaremos nosotros el timón de nuestra vida.



Estos “7 Principios Universales” son:


1º MENTALISMO: “Todo es mente”. Por todas las personas es conocido el poder mental. Esta ley dice que “Lo que tu piensas se manifiesta”.

Todas las personas trabajamos con un poder ilimitado, pero este poder NO se conoce en la sociedad.

No se sabe que todas las personas tenemos libre albedrío, y esto no es hacer lo que queramos, el libre albedrío es la posibilidad de pensar positivo o pensar negativo, en cada situación, en cada momento, de nuestra vida.

Y este pensamiento es el que va a crear nuestra vida, pero no es el pensamiento en solitario, no pensamos que estamos en Asia y ya estamos en Asia, sino que es la unión del pensamiento y el sentimiento la que crea nuestra vida.

Y en la mayoría de los casos en la humanidad, se siente que la vida es mala, que no hay trabajo, que no hay dinero, que tenemos mala suerte, cuando nada de eso es cierto, la suerte no existe, solo existe nuestra forma de pensar positiva o negativamente, la vida únicamente está funcionando perfectamente, nos está dando lo que tenemos en nuestra mente, si piensas y sientes que todo te sale mal, siento decirte que eso es lo que tendrás en tu vida.

Por eso si quieres cambiar tu vida tienes que RENOVAR tu mente,
pero esto no es nuevo, se ha sabido siempre: “Sois transformados por la renovación de vuestra mente” (Romanos 12;2), de ahí que la física cuántica afirme que “todo se crea de un pensamiento previo”.


2º CAUSA Y EFECTO: “Toda Causa tiene su efecto, todo efecto tiene su causa”.

No hay efecto sin causa, al igual que no hay estímulo sin respuesta.

Este principio se estudia junto con el principio de mentalismo, ya que el efecto de ser infeliz, tiene su causa en pensar y sentir negativamente.

Este principio también dice que todo lo que hagamos a los demás, ya sea bueno o malo, nos será devuelto, es el efecto boomerang.


3º CORRESPONDENCIA: “Como es arriba es abajo”.

Viendo como es el estado de nuestro exterior, de nuestro mundo físico, así es el estado de nuestro mundo interior y viceversa.

Viendo la composición de un átomo se deduce la composición del sistema solar, exactamente igual pasa con nuestra vida, si nuestra vida es un desorden, nuestro interior será un desorden.

Cuando se calme nuestro mundo interior se aliviará nuestro mundo físico, y no al contrario.



4º VIBRACIÓN. “Todo vibra”.


Si vemos el universo a través de los ojos de un microscopio nos daremos cuenta que está compuesto por millones de átomos, que a su vez están compuesto por millones de partículas que están en continuo movimiento.

Todo está vibrando, todo está evolucionando pero no lo vemos, es como el cabello o las uñas, no lo vemos crecer, pero está en continuo movimiento. Todo en la vida tiene una vibración, positiva o negativa, que generará CAUSAS y EFECTOS positivos o negativos.

Este principio esta relacionado con la premisa científica “Lo semejante a lo semejante”.



5º POLARIDAD:
“Todo tiene dos polos”.

Norte- Sur. Frío- Calor. Alto- Bajo. Positivo- Negativo.

Todo en el universo tiene dos polos, si estamos en el polo positivo nos irá bien, si estamos en el polo negativo nos irá mal, por que hemos generado CAUSAS negativas.



6º RITMO: “Todo tiene su ritmo”.


Después del invierno siempre viene el verano, después de la noche siempre viene la mañana, y así con todo.

Hay que hacer las cosas con ritmo, por eso hay personas que quieren cambiar su vida, de hoy a mañana, y no lo consiguen, lo han hecho sin ritmo.


7º GENERACIÓN: “Todo se genera”.

Todo en el universo es creado.

Al igual que un bebe se genera de la unión de hombre-mujer, así generamos nuestra vida.

Si en nuestro alrededor continuamente estamos generando el mal, la discordia, la crítica, etc, y estamos continuamente generando causas negativas, no podemos generar positividad en nuestra vida, y por eso nos creemos que todo nos sale mal.


Con este conocimiento tenemos la posibilidad de ser, tener o hacer lo que queramos en nuestra vida, para eso tenemos nuestro libre albedrío.

QUE DISFRUTES ESTA EXPERIENCIA INFINITA!