John J. Williams, un ingeniero eléctrico, en 1998 hizo un muy peculiar descubrimiento: un pequeño objeto que parecía un enchufe eléctrico de tres puntas sobresaliendo de la tierra.
Después de que se puso a cavar, pronto se dio cuenta de que el "conector" era parte de una pequeña roca.
Williams dijo que encontró la extraña piedra durante un viaje en una zona rural de América del Norte, lejos de los asentamientos humanos, complejos industriales, aeropuertos, fábricas y plantas de energía o armamento nuclear.